María Simma es una mujer con dones místicos que nació en Sonntag, Austria, en 1915. De familia de agricultores y campesinos, era gente de campo humilde, buenos católicos, con una fe sencilla, pero de gran devoción. Desde 1940, María comenzó a recibir con regularidad visitas de las ánimas del purgatorio. Es importante tener en cuenta que María nunca buscó esas visitas; nunca las llamó ni las “convocó” de ninguna manera. Las benditas almas del purgatorio le dijeron que había sido Dios quien, en su gran misericordia, les había dado permiso para acercarse y obtener de ella oraciones y sacrificios para acortar el tiempo que debían pasar en el purgatorio. Las ánimas se le aparecieron a María durante 64 años, hasta su muerte en 2004.
La ánimas benditas le dijeron repetidamente a María que nuestra mejor ayuda por ellas era ofrecer la santa Misa; y junto a la Misa, rezar por ellas el santo rosario o las estaciones del via crucis también les beneficiaba.
Según María, la “queja” más grande de las benditas ánimas del purgatorio es que sus propias familias y sus seres queridos suelen olvidarlas completamente y no reciben ninguna ayuda espiritual de aquellos a los que tanto ayudaron mientras estaban vivas. Rezan muy poco por ellas, incluso en sus funerales. Y precisamente, ¡son las oraciones lo que más necesitan! Durante sus visitas a María, las almas del purgatorio le revelaron muchas cosas sobre sus vidas y sobre nuestro mundo, visto a través de los ojos de Dios.
Este libro es una compilación de las más de 60 entrevistas que el autor, Nicky Eltz, realizó a María Simma a lo largo de dos años. Nos ayudará a vislumbrar mejor el purgatorio y el Cielo y nos revelará mucho de nuestra fe y de su relación con el mundo que nos rodea. Y más importante aún, nos ayudará a fortalecer nuestra fe y a que crezca nuestra devoción a las benditas ánimas del purgatorio. Realmente es un libro que hay que leer.
